La naturaleza nos ofrece una increíble gama cromática por explorar.
Los colores que podemos obtener, como los ciclos de la vida, a veces mutan con las estaciones. Así, algunos tonos podemos obtenerlos todo el año, otros varían con la estación y de acuerdo a sus modos de tinción. Desde Neera eso nos parece precioso, porque vuelve a cada objeto único, nos insta a investigar en nuevas fórmulas y nos llena de sorpresas cuando en las ollas de tinción los colores se fijan en nuestros algodones y lanas.
Priorizamos la tinción a partir de desechos orgánicos, a los cuáles les extraemos el color antes de enviarlos al compost.
Así, nuestros procesos tintóreos no generan desperdicios de ningún tipo, y los resultados no son tóxicos para el uso humano ni para el ambiente.
Amarillos, ocres, anaranjados y verdes
A partir de piel de cebolla, yerba mate, romerillo, molle, remolacha.
Marrones y grises
A partir de té negro, óxidos, eucaliptus, cáscara de nuez, corteza de algarrobo.
Violetas y rosas
A partir de cáscaras de palta, grana cochinilla, corteza de eucaliptus, granada.
Azules (¡proximamente!)
A partir de índigo.